Wiki Lovecraft

Los perros de Tíndalos o sabuesos de Tíndalos son unas criaturas extradimensionales. Aparecen por primera vez en el relato homónimo escrito por Frank Belknap Long

Nombre[]

Pese a su nombre, estos seres no son perros, si bien se asemejan vagamente a sabuesos de presa por sus rasgos y comportamiento. En cuanto a Tíndalos, Frank Belknap Long deja ambiguo lo que significa, no dejando claro si esto es una entidad o un lugar. Las fuentes de rol optaron por la segunda opción, haciendo de Tíndalos el nombre de la región natal de los perros al establecer la existencia de unos "señores de Tíndalos" y de Mh'ithrha, el "gran señor de Tíndalos".

Apariencia[]

"...En sus cuerpos flacos y famélicos se concentra todo el Mal del universo. En realidad no estoy seguro de que tuvieran cuerpo: sólo los vi un instante."

Esta es la vaga descripción que se da de los perros de Tíndalos. En cuanto al aspecto que presenta alguien que ha sido atacado por un perro de Tíndalos, es posible encontrarlo leyendo el tercer capítulo del relato, en el cual detallan como fue encontrado el cuerpo de Halpin Chalmers después de que este fuera asaltado por estas bestias:

"Chalmers yacía boca arriba en el centro de la habitación. Estaba completamente desnudo y tenía el pecho y los brazos cubiertos de una especie de gelatina azulada. La cabeza, totalmente separada del tronco, reposaba sobre el pecho y sus facciones aparecían horriblemente retorcidas y mutiladas. No había ni rastro de sangre. La habitación presentaba un aspecto insólito. Todas las aristas habían sido cubiertas de escayola, que en algunos sectores se había agrietado y en otros, desprendido. Los fragmentos de escayola caídos habían sido agrupados en torno al cadáver, formando un triángulo perfecto."

Información conceptual y rol[]

Los perros de Tíndalos fueron creados por los dioses K'thunNoth-Yidik. Se dice que estos seres representan todo lo que es impuro y que, por ser la pureza algo incompatible con ellos, desean corromperla o destruirla. Esta naturaleza impura vincula a los perros con las formas angulares, pues estas carecen de la pureza que poseen las formas curvas.

Los perros de Tíndalos viven en el punto del espacio-tiempo correspondiente a la era de la Tierra en la que surgieron las formas de vida unicelulares. Desde él, son capaces de viajar por los ángulos del tejido dimensional para desplazarse a través del tiempo y perseguir a sus posibles víctimas. Por suerte, es poco probable toparse con un perro de Tíndalos, a no ser que se consuma la llamada "Droga Liao", que permite viajar en el tiempo y que puede acercar peligrosamente a la guarida de los perros a quien se sirva de ella irresponsablemente.

En caso de cometer la imprudencia de utilizar la Droga Liao para viajar a la era de los Perros de Tíndalos y ser descubierto por estas entidades, lo más sensato es regresar de inmediato al presente y buscar refugio en un espacio donde no exista ninguna forma angular. Los Perros de Tíndalos solo pueden manifestarse a través de ángulos agudos, por lo que su presencia se ve limitada por la geometría del entorno. Una estrategia de defensa consiste en sellar completamente una habitación, cubriendo todas las esquinas con cemento y eliminando cualquier mobiliario que pueda generar ángulos. Sin embargo, este método dista de ser infalible. Los Perros de Tíndalos cuentan con la asistencia de los dholes, criaturas capaces de provocar terremotos lo suficientemente intensos como para agrietar el cemento y restaurar la forma angular de las esquinas, abriendo así un acceso para sus amos. Si esto llegara a suceder, la víctima no tendría escapatoria.

Si el insensato fuera por un casual un brujo, sería de vital importancia que realizase el pentáculo pnakótico en el suelo, se colocase sobre él y pronunciase los ensalmos correspondientes. Si bien deja exhausto a quien lo realiza, hace huir a los perros que se acerquen hasta medio metro del pentáculo y evita todo daño físico.

Relatos[]

Obras de Frank Belknap Long[]

Los perros de Tíndalos[]

En este relato los protagonistas son atacados por los perros de Tíndalos tras ser detectados durante un viaje espacio-temporal propiciado por el consumo de la Droga Liao.

Puerta al infinito[]

Los perros aparecen nuevamente en esta historia.

Obras de Howard Phillips Lovecraft[]

Horror en el museo[]

Son referidos indirectamente por George Rogers al usar la expresión "desove de Noth-Yidik y efluvio de K'thun". Cabe señalar que en ese momento aún no se había establecido que los retoños de estos dos seres eran los perros de Tíndalos.

Obras de Lin Carter[]

La locura que vino del tiempo[]

En este relato se establece que los retoños de Noth-Yidik y K'thun son los perros de Tíndalos.

Legado[]

Perro de Tíndalos
  • En los videojuegos de Games of Cthulhu para navegadores de Internet "The Necronomicon" y "The Necronomicon - Book of Dead Names", un Perro de Tíndalos es una de las cartas que puede producir un Ataque Arcano. En el primer juego, su factor de ataque es 12, mientras que en el segundo sólo es de 8. A la hora de realizar ataques ignoran el factor de defensa del adversario.
  • La franquicia Yu-Gi-Oh! posee un arquetipo de cartas llamado "Tindángulo", que hace referencia a los perros de Tíndalos y el uso que hacen de los ángulos. De hecho, las cartas de apoyo del arquetipo aluden a conceptos de geometría. Otra de ellas, "Jhrelth Tindángulo", hace alusión a la piedra de Jhrelth, elemento aparecido en la historia The Alkahest, escrita por Laurence J. Cornfold e incluida en la antología de Chaosium The Book of Eibon. Por su parte, "Dholes Tindángulo" alude a los dholes.

Véase también []