Henry Anthony Wilcox es un personaje secundario de La llamada de Cthulhu.
Biografía[]
Henry Anthony Wilcox es un joven escultor y estudiante de arte que reside en Providence, Rhode Island. Es descrito como una persona excéntrica, solitaria, y con un comportamiento reservado. Su interés por lo extraño y lo surrealista lo lleva a explorar temas inusuales en su trabajo artístico, creando piezas que parecen inspiradas en pesadillas y visiones perturbadoras.
Wilcox es parte de una familia acomodada y tradicional de Providence, aunque su estilo de vida y personalidad lo distancian de su círculo familiar, llevándolo a acabar viviendo en solitario en el Edificio Fleur-de-Lys. Es referido como un "joven extraño", con una mente abierta a lo inexplicable y a lo oscuro. Es sensible a lo sobrenatural y parece tener una conexión innata con fenómenos que escapan a la lógica.
A mediados de marzo de 1925, Wilcox comienza a experimentar extraños sueños, en los que observa ciudades ciclópeas de arquitectura no euclidiana, llenas de geometrías imposibles. También sueña con una criatura que más tarde sería identificada como Cthulhu. Estas visiones le causan una gran impresión, al punto de inspirarlo a esculpir un relieve de arcilla que representa a la monstruosa figura de Cthulhu, con tentáculos en el rostro y una forma que combina elementos humanos, draconianos y cefalópodos.
Intrigado y desconcertado por sus visiones, Wilcox lleva este relieve al profesor Angell, experto en lenguas semíticas y en el estudio de lo oculto. Wilcox relata sus sueños detalladamente a Angell, lo que despierta en el profesor un interés inmediato, ya que las imágenes y símbolos del relieve parecen coincidir con cultos antiguos que el profesor ya conocía. Lo más inquietante era que las visiones de Wilcox coincidían con una serie de fenómenos globales inexplicables y con sueños similares que otras personas sensibles alrededor del mundo también habían estado experimentando.
Angell y Wilcox se estuvieron entrevistando hasta que este último cayó en un estado de fiebre delirante que duró varias semanas. Durante este período parecía estar atrapado en un estado entre la realidad y las pesadillas, mencionando palabras extrañas y describiendo visiones aún más inquietantes. Al recuperarse, no volvería a experimentar aquellas visiones, con lo que vuelve a su vida normal, aunque las experiencias vividas quedan plasmadas en sus esculturas y su arte.
Curiosidades[]
- El edificio Fleur-de-Lys es un edificio real que todavía se encuentra en Providence. Bernard K. Hart, columnista del Providence Journal que vivía en el edificio fingió ofenderse con Lovecraft, diciendo en tono humorístico que este se habría "apropiando" del edificio. También a modo de broma Hart habría "amenazado" por escrito con "enviar un visitante fantasmal" a la dirección del propio Lovecraft. El soneto de Lovecraft, El mensajero, es su respuesta a la broma del columnista.
- "Wilcox" es un nombre del propio árbol genealógico de Lovecraft.